Sigfried78's Blog

Era sábado por la mañana, hacia frió y llovía. Decidí que el día estaba para acudir a la piscina a nadar y no para ir a correr por la calle como hacia siempre.

Las 9 de la mañana, la piscina estaba vacía, solo para mi como todos los días. Hasta las 11 nadie vendría a …

Empecé a nadar para quitar las … de toda la semana en el trabajo. Cuando llevaba 10 minutos nadando una chica entro a la piscina.

No la había visto en mi vida, pero era increíblemente preciosa. Hice una pausa, para poder observarla mientras se daba una ducha antes de entrar al agua. Tenía unas curvas espectaculares y llevaba un pequeño bikini de color rojo. Cuando se sentó en el borde de la piscina empezó a mojarse poco a poco su escultural cuerpo mientras me miraba.

Yo disimulaba colocándome el gorro y limpiando mis gafas de nadar.

Ni siquiera me di cuenta cuando se acerco a donde estaba yo y se puso a mi lado.

Ella dijo: Esto esta muy vacío, ¿vienes mucho?

Yo dije: Cada sábado es igual, hasta las 11 no viene nadie. Además el agua esta genial.

Ella dijo: Así que hasta las 11 estamos solos en la piscina. Que suerte, podemos nadar sin problemas. ¿No tienes miedo a que te pase algo aquí solo?

Yo dije: No creo que me pase nada se nadar muy bien. Sino no entraría al agua.

Ella dijo: veamos, hagamos una carrera, si nadas bien de verdad quizás te de un premio, por cierto me llamo Silvia.

Yo dije: ¿un premio? Yo me llamo Javi.

Mientras tanto la bella muchacha ya había comenzado a nadar gritando si te quedas ahí perderás el premio.

Hicimos una carrera ida y vuelta nada mas, evidentemente me saco mucha ventaja al quedarme parado un rato al iniciar la carrera. Pero casi la alcanzo antes de acabarla. Cuando fui a tocar la pared note que me cogia del brazo. Y me hacia un gesto de silencio con su dedo. Me quito las gafas y las dejo en el borde de la piscina mientras con su cuerpo me arrinconaba hacia la parte menos profunda. Estaba totalmente a su merced. Si ella quería me tenia rodeado.

Y con una sonrisa picara dijo.

Ella dijo: ¿Quieres tu premio?

Yo dije: aun no se que quieres aunque esto me pilla de sorpresa jamás me había pasado.

Entonces me dio un beso e intento apartarse para dejarme libre. Solo que no la deje, la agarre por la cintura y la bese apasionadamente, mezclando su lengua con la mía. No tardo en rodearme con sus piernas y abrazarme fuerte con uno de sus brazos. El otro lo dejo libre para poco a poco mientras me acariciaba el pecho ir bajando por mi abdomen e introducir su traviesa mano dentro de mi bañador.

Era evidente que la situación era muy excitante y yo estaba terriblemente excitado.

Ella comenzó a masturbarme de una manera suave, tierna y acompasada, el agua acompañaba el compás de nuestros movimientos y ayudaba a que la sensación fuese mas excitante aun, en cualquier momento podía llegar alguien a la piscina y encontrar el espectáculo que estábamos empezando a protagonizar.

Libere una de mis manos mientras con mi boca bajaba lentamente mordisqueando su precioso cuello y comencé poco a poco a introducir mi mano en su bañador primero con un solo dedo acaricie su sexo y eso pareció animarla, me apretó un poco mas fuerte mi miembro con su mano. Introduje un dedo dentro de ella, pero no me conforme con eso.

Aparte el bikini me baje un poco mi bañador ella soltó su mano e introduje mi miembro dentro de ella. Deje que ella llevase el ritmo, era un ritmo suave y muy agradable pero yo quería ir un poco más deprisa, así que di la vuelta y apoyé su espalda contra el borde de la piscina. Y comencé a poner mi ritmo, un poco más fuerte con cada embestida. Nos besamos continuamente mientras una y otra vez entraba y salía de ella. Hasta que al final nos corrimos y nos quedamos abrazados un leve instante. Hasta que me di cuenta que casi eran las 11. Me subí el bañador la di un ultimo beso. Y la dije.

Yo dije: Te espero a la salida y si me acompañas a mi casa podemos repetirlo.

Ella dijo: Encantada, ¿me esperas entonces?